Mar. Oct 22nd, 2024

Valencia cumple un año más con la tradición de homenajear a su Patrón, Sant Vicent Ferrer. Con gran devoción la ciudad se ha volcado con el Santo. El 24 de abril, Valencia está de celebración. Y es que el segundo lunes de Pascua, las calles de nuestra ciudad se visten de gala para celebrar la festividad de San Vicente Ferrer, patrón de la Comunidad Valenciana, y canonizado en el siglo XV por el Papa Calixto III.

La Junta Central Vicentina organiza para este día diferentes actos, entre los que destacan, además de la ofrenda conjunta y la procesión vespertina desde la Catedral de Valencia, la representación de los Milagros de San Vicente Ferrer en la que, este año, han participado alrededor de 200 niños valencianos, y los populares altares vicentinos, que se encuentran tanto en Valencia como en municipios de alrededor.

La Honorable Clavariesa de les Festes Vicentines, y el concejal de Cultura Festiva, Pere Fuset junto a las Falleras Mayores de Valencia han presidido el desfile de la Procesión cívica de la ofrenda a Sant Vicent Ferrer, Patrón de la Comunitat Valenciana

Como es tradicional, representantes de los catorce altares y Falleras Mayores y presidentes de las fallas de la ciudad, han formado parte de esta procesión cívica que, tras la Misa en la Catedral, recorre el centro de la ciudad desde la Plaza del Ayuntamiento hasta la Casa Natalicia de Sant Vicent en el Pouet de la calle del Mar.

En este sentido, actualmente, a parte de los altares que se ubican en Valencia, también existen altares vicentinos en Xirivella, Mislata, Ribarroja, Meliana, La Canyada, Llíria y L’Eliana, entre otras. Sin embargo, el altar más antiguo, que data de 1561, se sitúa cerca de la iglesia del ‘Pouet’ de San Vicente, en la casa natal del santo.

Una procesión en la que destaca una prenda muy característica, la mantilla. Una ocasión para verlas y admirarlas en todas sus formas y estilos. Entre las clavariesas, en su mayoría, preciosas mantillas españolas todas en negro como el resto de su indumentaria.

Entre las participantes vestidas de valenciana, la mantilla de media luna resulta la más utilizada. Tanto entre falleras vestidas al estilo del siglo XVIII como entre las muchas que han optado por vestir “a l’antiga“. Batistas, sedas, tules, chantillys, reproducciones, prendas antiguas y recién confeccionadas…

La visita a la Iglesia de la Casa Natalicia, la fuente y el pouet han sido las paradas obligatorias en un acto .Por último, es importante recordar que San Vicente Ferrer, además de ser reconocido como la mayor fuente de milagros de la Iglesia, fue uno de los políticos, teólogos, intelectuales y filósofos más influyentes de su época.